Toluca,
Estado de México.- Ubicado en una casona que data de principios del siglo XX,
el Museo de la Acuarela del Estado de México cumple este 17 de enero, 28 años
de ser un importante foro que busca preservar y difundir la técnica de la
acuarela en México.
Dirigido
por el acuarelista, Benito Nogueira, este espacio ha sido promovido dentro y
fuera del país, logrando ser reconocido, gracias al interés y trabajo del
personal que labora en él y al apoyo recibido de la A.C. Amigos del Museo de la
Acuarela del Estado de México.
El recinto
cultural cuenta con nueve salas permanentes que exhiben la obra de grandes
exponentes como Pastor Velásquez, Alfredo Guati Rojo, Vicente Mendiola, Edgardo
Coghlan, Ignacio Barrios y Ángel Mauro.
Asimismo,
cuenta con una sala llamada Estado de México que muestra las piezas ganadoras
en los concursos sobre temas turísticos de la entidad y la sala de donaciones
que alberga los cuadros de quienes han participado en el museo y donado como
constancia de ello.
Sólo por
mencionar algunas, la “Ex hacienda de Ayala”, y “Maternidad”, de la autoría de
Coghlan, son piezas que destacan en este museo, porque reúnen todas las
características de una acuarela completa, como sus tonalidades, el manejo del
fondo y la unión con la figura, cuenta con una composición perfecta.
Muy
importante y fructífero es el trabajo de difusión de la acuarela que
permanentemente realizan los Amigos del Museo, quienes organizan exposiciones,
talleres, concursos, entre otras actividades, para fortalecer al museo.
Como punto
de encuentro de importantes acuarelistas, este museo ha obtenido una gran
respuesta, a lo largo de estos años, en sus concursos anuales como el
internacional Arte-correo. El color se mueve, Tláloc, y la iniciativa Un día,
una acuarela, que congrega a los interesados en realizar, en exteriores, una pintura
rápida que es premiada.
A un
costado de la Alameda central, en Melchor Ocampo No. 105, colonia La
Merced-Alameda, este museo invita a la comunidad en general a que conozcan la
obra de grandes exponentes de la acuarela, a través de sus salas que podrán
recorrerse, de manera segura y con todas las medidas sanitarias, cuando las
autoridades sanitarias lo permitan.
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